jueves, 10 de enero de 2019

Café Inconcluso

Yo tengo dos versiones ¿cuál te convence más?
te contare un poco, la primera va de la moral, de los valores, de un hombre, de su deidad, de lo dadivoso, de brindarle la mano al ciego de alcohol mientras ella se deja llevar por su sonrisa amable de las dos de la tarde.

La segunda versión, de cuando el ciego se dio cuenta que se puso la soga al cuello,sin embargo se sentía bien con eso, de que los valores y la moral son innatos en el, nadie es especial a su sonrisa amable, créeme, ni a las dos de la tarde, ni a ninguna hora, la frivolidad, la apariencia siempre ¨adquirida¨ sera lo primero que barran sus ojos,los ojos, los ojos negros y penetrantes...

Ella no sabía tu nombre, tampoco sabías el de ella, a veces va de otro tipo de conexiones,no hablo de lo carnal, sino de la psique, del espíritu, su falta de reencontrarse estaba en ella y su falta de personas como mi primera versión estaba en el.

Entonces ¿qué pasó? fue acaso haberse sentido tan cercanos desde el primer momento pero sin saber sus nombres o fue tal vez que ella llegó muy tarde o mas bien muy temprano en la ¨caza¨ de su vida.

-repito, lo que buscas, no es lo que busco-

Pero después ella le dijo a alguien -lo que pasa es que si debe ser cuando yo quiera-
en esta época las cosas no funcionan así, te mal acostumbraste pequeña niña...

¨Así en el poco tiempo, así en los pocos días y en las pocas noches, pero así en las muchas acciones, actos, valores y modales... pero que modales¨.